Blanqueamiento Externo

El blanqueamiento dental externo es uno de los recursos estéticos más sencillos que permite mejorar la apariencia de una sonrisa de manera casi instantánea. Se lo denomina externo porque el agente blanqueador se deposita en la superficie del diente, a través de una cubeta muy delicada que permite el contacto entre ambos. Puede realizarse en el consultorio dental o de forma ambulatoria por la noche mientras el paciente duerme. 

Para realizar el tratamiento es importante la primer consulta diagnóstica del paciente para la evaluación del caso y toma de color inicial. El estudio de cada caso en particular permite organizar con el paciente el protocolo de trabajo que se llevará adelante y el tipo de blanqueamiento que el mismo necesite en su actualidad.

En la búsqueda de aclarar los dientes acompaño a mis pacientes de forma constante para supervisar cómo el agente blanqueador actúa de forma correcta. 

Este exitoso tratamiento nos ayuda a eliminar manchas superficiales y profundas  de nuestros dientes como son las del café, el tabaco, el vino,el mate y todo agente colorante que con el tiempo se ha impregnado en el esmalte dental.

Blanqueamiento Interno

El blanqueamiento dental interno está indicado para aquellas piezas dentarias que han sufrido una variación en su color, tornándose grisáceas, como consecuencia de un tratamiento de conducto.

El procedimiento consiste en acceder al interior del diente por medio del mismo orificio que se utilizó para realizar el tratamiento de conducto, y se coloca allí una solución blanqueadora. Luego se sella el orificio y se espera una semana hasta la próxima sesión donde se revisa el resultado y si es necesario se repite el procedimiento hasta obtener el color deseado. Una vez que se logra aclarar la pieza dentaria, la misma es obturada de manera definitiva.